En los casos de ejercicio intenso que precisa energía por encima de los niveles que pueden ser suministrados mediante las reacciones metabólicas aeróbicas, el glucógeno muscular y la glucosa sanguínea suministran la mayor parte de la energía para la resíntesis de ATP, creándose ácido láctico, el cual en grandes cantidades es un gran limitante del esfuerzo muscular.
El ácido láctico no debe considerarse un producto de desecho metabólico, ya que al cesar la actividad intensa, el ácido láctico puede utilizarse para formar glucosa en el hígado, en el proceso denominado ciclo de Cori. Este ciclo no sólo es un medio para aumentar la glucosa sanguínea y el glucógeno muscular, sino una importante vía para eliminar el ácido láctico y subir el pH.
No hay comentarios:
Publicar un comentario